Después de llevar mi máquina del tiempo a pasar una revisión para dejarla como nueva, me dispongo a retomar mi viaje junto a nuestro Leo y os invito a acompañarnos, y aterrizar de nuevo en el año 2002, el mismo de nuestra anterior entrada.
Y es que ese año fue muy fructífero para Leonardo, que comienza a espaciar sus trabajos muy poco debido a lo solicitado que se encuentra y, aún teniendo en cuenta, que este gran actor escoge muy cuidadosamente los films en los que participa.
Junto a su nuevo proyecto, nacerá también una muy buena amistad con un gran director, que durará hasta el día de hoy.
Leo se convertirá en el preferido del consagrado genio Martin Scorsese, que sustituirá a su apreciado actor fetiche Robert De Niro, con el que trabajó en Malas Calles (1973), Taxi Driver (1976), New York New York (1977), Toro Salvaje (1980), El rey de la comedia (1983), Uno de los nuestros (1990) y Casino (1995), por Leonardo. De ahí que se haya calificado en múltiples ocasiones a DiCaprio como «el nuevo De Niro«.
Y su historia de amor empieza aquí, durante el rodaje de Gangs of New York.
Después de que Scorsese anduviera décadas con el proyecto en la cabeza y de que paseara la historia de un guionista tras otro por medio Hollywood (el guión está basado en un libro con el mismo nombre de 1928), el rodaje arrancó realmente en el año 2000, cuando se empezó a construir en los estudios de Roma Cinecità, una ciudad calcada a la Nueva York de 1840/60 aproximadamente.
Curiosamente, fue el mismo De Niro quien aconsejó a Scorsese que se fijara en DiCaprio, con el que había trabajado en Vida de este chico y La habitación de Marvin.
Martin se entusiasmo: –Yo le tengo una gran admiración a Leonardo DiCaprio y he seguido su trabajo en todas sus películas. Yo siempre pensé que me gustaría trabajar con un actor que tuviera los instintos que él posee. Él es la clase de actor al que yo estoy acostumbrado. Creo que su linaje es parecido al de Robert De Niro, Al Pacino y Dustin Hoffman.–
Algo que no deja de ser admirable, y nos recuerda que no todos lo consideraron sólo una estrella juvenil tras Titanic.
Leonardo, a su vez, no sólo estaba encantado con la idea de trabajar con Scorsese, sino que su ambición iba más allá: –Yo escuché sobre Gangs of New York cuando tenía dieciséis años (la historia de un joven emigrante irlandés en los 1860 ubicada en el centro de la revuelta urbana más grande del nuevo mundo). Estaba tan determinado a hacer este proyecto con Martin que cambié de agencia cuando tenía diecisiete años para poder tener un contacto cercano con él.-
Es inevitable pensar, que el destino estaba decidido a unir a estos dos grandes artistas. Y lo hizo. La pregunta es… ¿hasta cuando?
Está película se llevó 10 nominaciones a los Oscars pero, lamentablemente, no ganó ninguno de ellos y perdió contra películas tan admirables como Chicago y El Pianista.
Como el coste fue tan alto (más de cien millones de dólares), tampoco supuso un gran éxito monetario, aunque produjo beneficios. Y, a pesar de todo, obtuvo más buenas que malas críticas:
«La largamente esperada, enormemente cara e interminable fuente de cotilleos última película de Scorsese, una brutal historia épica sobre el Manhattan de mediados del XIX, es un film casi grande que, seguramente, ganará con el tiempo. (…) imperfecta e indeleble» (A. O. Scott: The New York Times)
«Grandiosa en todos los sentidos.» (Carlos Boyero: Diario El Mundo)
«Un fresco grandioso (…) magnífico retrato social y político.» (Miguel Ángel Palomo: Diario El Mundo)
Anécdota:
Al final aparece un cambio temporal en una secuencia donde se muestra como evoluciona la ciudad desde la época que refleja la película hasta la actualidad. Cuando se tomó la imagen aún seguían en pie las Torres Gemelas que, desgraciadamente, ya habían sido derribadas cuando se estrenó el film, lo que produjo algo de polémica, ya que Scorsese decidió dejar la imagen tal y como estaba.
Mi crítica:
En la primera escena nos encontramos en 1846. Si le sumamos 16 años, que es en el momento en el que nuestro protagonista vuelve a su antiguo barrio, nos encontraríamos entonces en 1862, cuando Abrahan Lincoln liberó a los esclavos del norte mediante una proclamación y en plena Guerra Civil (1861/1865).
La desigualdad de clases sociales es obvia, por lo que se crean bandas que luchan por el dominio del territorio. La lucha se lleva a cabo entre nativos e inmigrantes, y la llegada continua y masiva de irlandeses no alivia, precisamente, la tensión.
En este contexto nos encontramos cuando el joven Ámsterdam regresa, con deseos de venganza, al barrio de Five Points, donde gobierna ahora “el Carnicero”, que no es otro que el hombre que asesinó a su padre.
Scorsese narra una época oscura de suciedad y pobreza, y el conflicto que surgió cuando el presidente Lincoln hizo un obligatorio llamamiento a filas que acabó en las revueltas más sangrientas de la historia de EEUU. Y lo hace con una crudeza inusual, recalcando la brutalidad del periodo con una absoluta perfección.
Recrea magistralmente un barrio de casas de madera amontonadas, burdeles, cantinas, calles sucias y gente inmoral, como nunca antes se había visto en el cine.
Todo ello a través de los ojos de un joven huérfano con ansia de justicia, que encontrará en su interior la necesidad de intentar cambiar las cosas en su búsqueda de una vida mejor .
El reparto, con nuestro Leo a la cabeza, cuenta también con el inigualable Daniel Day Lewis, Cameron Diaz, Liam Nelson, entre otros conocidos actores que aportan credibilidad y solidez a la actuación.
Esta película es, sin duda, un autentico viaje al pasado que no te puedes perder.
Puntuación para Leo: 10